A primera hora de la mañana del viernes, el desbordamiento del río Riguel atemorizaba a los 1.600 habitantes de la localidad zaragozana de Sádaba, en las Cinco Villas. Pasado el peligro, ahora quedan los efectos de una riada desastrosa que ha cambiado por completo la estampa de este municipio lleno de lodo. El barro entró en casas, ha anegado electrodomésticos, muebles, enseres, existencias de negocios, la tienda, el bar, la escuela, el centro de salud... Los bomberos siguen trabajando con intensidad junto a los equipos y la maquinaria que la Diputación de Zaragoza desplegó allí tras la riada....Fuente: ABC.es
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