Una autopista de peaje en España, en bancarrota. La AP-41 entre Madrid y Toledo se declaró en suspensión de pagos dado el descenso de afluencia de vehículos y, por tanto, de ingresos por el peaje. La empresa concesionaria de la Madrid-Toledo, de unos ochenta kilómetros, es una de las cinco que ya se han declarado en bancarrota en los últimos meses a causa de la crisis en el sector.
En total, se calcula que los concesionarios de autopistas españolas arrastran una pérdidas de casi 4.000 milllones de euros. Otras concesionarias con problemas son las que explotan las radiales tres, cuatro y cinco en torno a Madrid y la de Cartagena-Vera. La subida del IVA en septiembre ha agravado más la situación, aunque el gobierno de Mariano Rajoy se plantea una nacionalización para salvarlas.
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